Cuando reescribamos la historia

Voy a comenzar esta reseña confesando una cosa: Nunca leí Una Sonata de Verano. Una vez dejado claro esto y entendiendo que doy vergüenza y no van a seguir leyendo, voy a seguir sola de ahora en más con mi reseña.

Tengo que ser más que sincera, este libro me aburrió mucho al principio. No entendía bien para donde iba Belén, que quería contar. Lo dejé varias veces y otras varias decidía seguirlo por el hype que tenían en las redes y porque todes aman a Belén. Sentía que estaba leyendo una historia base de adolescentes, amigos que ya no son amigos, pero con el agregado del pseudo viaje al pasado de Julen. Al final de la reseña les voy a decir que fue lo que realmente sentí al terminar el libro…

La historia comienza en la actualidad con dos amigos, Julen y Melissa, yendo a una aburrida reunión de ex alumnos (las odios, por eso no hablo con mis ex compañeros), cuando se cruzan con Ibai, el ex amigo de Julen que acaba de salir de la cárcel, quien se acerca y le entrega un diario antes de desaparecer para luego tomar una drástica decisión.
El tema es que Julen se despierta al otro día y es nuevamente un adolescente (como la peli Quisiera ser Grande, de Tom Hanks, pero al revés) y con esa sensación de no saber si su sueño fue solo eso o realmente tuvo una premonición del futuro. Como para no correr riesgos, decide tomarlo como una premonición y empieza a intentar acercarse nuevamente a Ibai para evitar que mate a una persona y termine preso.

Este es el argumento base del libro, aunque para mí no es el más importante, sino el que hace de hilo conductor entre las cosas que realmente importan como la historia de Ibai, la orientación sexual de Julen y de Melissa, el bulling que ejerce Saul, el maltrato y por sobre todo algo super importante que se desarrolla al final del libro.

Lo que me pasó al leerlo, como dije al principio, es que me costó adentrarme en la historia y conectar con los personajes. Durante la mitad del libro lo intentaba leer fracasando cada diez páginas. Pero ya pasada la mitad del libro la historia comienza a ponerse seria y fuerte y ahí cuando entiendo el hypeo que genero el libro. Cuanto más te acercas al final más fuerte se pone y obvio, sentís un montón de cosas (no quiero contar demasiado). Aun cuando empaticé siempre con Julen por los maltratos que ejercía Saul contra él, los últimos capítulos del libro son super intensos, como un remolino de sensaciones y de sentimientos.

Cuando terminé el libro sentí que cada capítulo termino valiendo la pena de leer. Simplemente un libro increíble.